Travis Biggs – Tibetian Serenity / Autumn Jewel / After The Storm

Este lanzamiento es una auténtica joya que llega directo desde los archivos del sello Demon Records, reviviendo una de las etapas más creativas de Travis Biggs, tecladista y arreglista que supo darle un giro personal a la música de finales de los setenta. Conocido por haber compartido escenario con Isaac Hayes en plena era disco, Biggs se distinguió también por sus incursiones en proyectos propios cargados de sintetizadores, texturas espaciales y un groove adelantado a su tiempo. De ese viaje cósmico surge este maxi-sencillo de 12" titulado “Tibetian Serenity”, una reedición que pone al alcance un sonido imposible de ignorar para quien busca vinilos con carácter y personalidad.

El disco reúne tres cortes extraídos del legendario álbum “Solar Funk” de 1979, editado originalmente por Source, filial de MCA. Se trata de un material que mezcla la elegancia del jazz-funk con la fuerza hipnótica de la música de club, logrando atmósferas expansivas que suenan tan actuales como hace más de cuatro décadas. El tema principal, “Tibetian Serenity”, es un viaje instrumental cargado de misticismo, líneas de teclado envolventes y un ritmo que flota entre lo meditativo y lo bailable. En la cara B, “Autumn Jewel” ofrece un respiro lleno de calidez y melodía, mientras que “After The Storm” se despliega con un aire reflexivo que contrasta perfectamente, cerrando el conjunto con un tono profundo y evocador.

Este vinilo no solo destaca por la riqueza musical, sino también por su relevancia cultural: uno de los tracks incluidos fue sampleado por J Dilla, lo que le otorga un valor adicional para quienes reconocen la conexión entre el soul jazz setentero y la evolución del hip hop. Tener esta reedición en las manos es abrir una puerta a la experimentación sonora de un artista que entendía cómo unir mundos distintos en un mismo groove. “Tibetian Serenity” es, en definitiva, un disco pensado para colecciones que buscan singularidad y para sets que se atreven a explorar lo inesperado, con esa vibra inconfundible que solo un buen vinilo puede entregar.