Donald Byrd – Think Twice / Where Are We Going?

Major Keys vuelve a sorprender con una reedición que rinde homenaje a una de las etapas más visionarias de Donald Byrd, un músico que no se conformó con ser solo una figura del jazz tradicional, sino que decidió expandir sus horizontes hacia el funk y el soul de los años setenta. Este vinilo de 12 pulgadas reúne dos cortes imprescindibles que marcaron época: “Think Twice” y “Where Are We Going”. Dos piezas que, escuchadas hoy en día, siguen demostrando por qué Byrd fue un adelantado a su tiempo.

“Think Twice”, tomada de su álbum de 1975 “Stepping Into Tomorrow”, es una auténtica declaración de intenciones. Producida por los legendarios hermanos Mizell, la pieza despliega un groove hipnótico en el que el trompetista explora nuevas texturas, acompañado de sintetizadores, coros y una base rítmica inconfundible. No es casualidad que este tema haya sido muestreado hasta el cansancio por productores de hip hop y house, convirtiéndose en un clásico que trasciende generaciones. Cada vuelta de este vinilo es un recordatorio de cómo el jazz puede reinventarse y seguir influyendo en las pistas de baile más exigentes.

Por su parte, “Where Are We Going” proviene del disco “Black Byrd” de 1973, la primera colaboración de Byrd con Blue Note en alianza con Motown. Esta pieza, producida por Larry Mizell y Larry Gordon, es puro soul-jazz en su máxima expresión. Tan sólida es su composición que incluso Marvin Gaye la interpretó posteriormente, elevando aún más su estatus de joya atemporal. Con un bajo redondo, arreglos sofisticados y la trompeta de Byrd en plena forma, el track tiene la fuerza suficiente para conquistar tanto a melómanos como a quienes buscan un toque elegante y profundo en sus sets.

Este lanzamiento con licencia oficial es más que una simple reedición: es un puente entre el pasado y el presente, un objeto de colección y a la vez una herramienta de inspiración para quien quiera explorar la energía cruda del funk, el alma del soul y la sofisticación del jazz. Poner la aguja sobre este vinilo es entrar en un viaje sonoro que sigue siendo tan relevante hoy como lo fue hace cincuenta años.